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Jesús resucita a la hija de Jairo

Dos milagros, ya que Jesús sana a una mujer que tocó el borde de su manto y luego viaja a la casa de Jairo para resucitar a su hija.
Contribución de LUMO project
1
Después de estar al otro lado del mar de Galilea, en la región de los gerasenos, Jesús y sus discípulos regresaron a Capernaúm. Había una gran multitud esperando a Jesús. – Número de diapositiva 1
2
Entre los que se apresuraron a llegar a la orilla había un hombre que quería ver urgentemente a Jesús. – Número de diapositiva 2
3
Se llamaba Jairo, jefe de la sinagoga de Capernaúm. Jairo se postró a los pies de Jesús y le suplicó: “Mi hijita se está muriendo. Por favor, ven y pon tus manos sobre ella para que se sane y viva”. – Número de diapositiva 3
4
Jesús aceptó ir a la casa de Jairo. – Número de diapositiva 4
5
Una gran multitud les seguía, apretando a Jesús por todos lados mientras se abrían paso por las calles angostas. – Número de diapositiva 5
6
Y había entre la multitud una mujer que había tenido flujo de sangre por 12 años, y había gastado todo lo que tenía en médicos para tratar su condición, sin provecho alguno, sino que al contrario, había empeorado. – Número de diapositiva 6
7
Su condición la hacía "impura" según las leyes judías y al tocar a alguien también lo convertiría en impuro. Cuando vio a Jesús, se abrió paso entre la multitud hasta situarse justo detrás de él. – Número de diapositiva 7
8
Entonces, ella extendió la mano hacia el borde de su manto (un símbolo del poder y la autoridad de una persona). Pensó: "Si toco su ropa, me sanaré". Inmediatamente se detuvo la sangre y sintió en su cuerpo que se liberaba de su sufrimiento. – Número de diapositiva 8
9
Aunque Jesús estaba siendo empujado en todas direcciones por la multitud, sabía que había salido poder de Él. Se dio la vuelta y preguntó: "¿Quién ha tocado mi ropa?” – Número de diapositiva 9
10
Cuando todos lo negaron, Pedro dijo: “Maestro, la gente se agolpa y presiona contra ti”. Pero Jesús dijo: “Alguien me ha tocado; sé que salió poder de mí”. – Número de diapositiva 10
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Entonces la mujer, viendo que no podía pasar desapercibida, se acercó temblando y cayó a sus pies. Delante de todos, contó por qué le había tocado y cómo había quedado sanada al instante. – Número de diapositiva 11
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Le dijo: “Hija, tu fe te ha sanado. Ve en paz y libérate de tu sufrimiento”. – Número de diapositiva 12
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Mientras Jesús hablaba, llegaron unas personas de la casa de Jairo, el jefe de la sinagoga. “Su hija ha muerto", le dijeron, “¿Por qué molestar más al maestro?” – Número de diapositiva 13
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Al oír esto, Jesús le dijo a Jairo: “No tengas miedo. Cree y quedará sana”. Acompañó a Jairo a su casa, prohibiendo a todos, excepto a Pedro, Santiago y Juan, que les siguieran. – Número de diapositiva 14
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Fuera de la casa de Jairo, Jesús vio a los que lloraban y se lamentaban con fuerza. Entró y les dijo: "¿Por qué este alboroto y estos lamentos? La niña no está muerta, sino dormida". Pero ellos se burlaron de Él. – Número de diapositiva 15
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Después de pedirles que salieran a todos, Jesús tomó a los padres de la niña, junto con Pedro, Santiago y Juan, y entró donde ella estaba. – Número de diapositiva 16
17
Jesús la tomó de la mano. – Número de diapositiva 17
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Entonces le dijo: "¡Talita cum!” (que significa “Niña, a ti te digo, ¡levántate!)”. – Número de diapositiva 18
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Inmediatamente, la niña de 12 años se levantó y comenzó a caminar. – Número de diapositiva 19
20
Sus padres y Pedro, Santiago y Juan estaban completamente asombrados. Jesús dio órdenes estrictas de que nadie se enterara y les dijo que le dieran algo de comer. – Número de diapositiva 20
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Número de diapositiva 21