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Eliseo: un niño muerto resucitado

Eliseo ora y un niño muerto vuelve a la vida.
Contribución de Sweet Publishing
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Un día, el profeta Eliseo fue a Sunén. – Número de diapositiva 1
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Allí estaba una mujer acomodada que le instó para que se quedara a comer. Entonces, cada vez que pasaba, él iba a comer con ella y su esposo – Número de diapositiva 2
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La pareja sabía que Eliseo era un varón de Dios y construyeron una pequeña habitación en el techo y la amueblaron con una cama, una mesa, una silla y una lámpara. Sería un cuarto de huéspedes para que Eliseo lo usara dondequiera que estuviera en el área. – Número de diapositiva 3
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Un día, cuando Eliseo y su criado Giezi se alojaban en la habitación de invitados, el profeta se preguntó qué se podía hacer para compensar su bondad. Giezi dijo: “No tiene hijos y su marido es anciano” – “Llámala” – dijo Eliseo. La mujer se acercó y se paró en la puerta. “Por esta época, el año que viene, tendrás un hijo en tus brazos” – le dijo Eliseo. – Número de diapositiva 4
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“¡Por favor, varón de Dios, no me engañe!” ella dijo. Pero la mujer quedó embarazada y al año siguiente dio a luz un hijo, tal como le había dicho Eliseo. – Número de diapositiva 5
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El niño creció y un día salió con su padre, que estaba con los segadores. De repente le gritó a su padre: “¡Mi cabeza! ¡Mi cabeza!” Su padre le dijo a un sirviente que se lo llevara a su madre. – Número de diapositiva 6
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El niño se sentó en el regazo de su madre hasta el mediodía y luego murió. Lo acostó en la cama del hombre de Dios, en la habitación de invitados y cerró la puerta. – Número de diapositiva 7
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Llamó a su esposo y le dijo: “Por favor, envíame a uno de los sirvientes y un burro para que pueda ir rápidamente al hombre de Dios y regresar”. “¿Por qué ir con él ahora?” preguntó su marido. Ella no se lo dijo, sino que partió de inmediato. – Número de diapositiva 8
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Ensilló el burro y le dijo a su sirviente: “Adelante. No disminuyas la velocidad por mí a menos que te lo diga”. Viajaron lo más rápido que pudieron a Eliseo que estaba en el monte Carmelo. – Número de diapositiva 9
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Cuando encontró a Eliseo, lo sujetó por los pies. Giezi se acercó para apartarla, pero el hombre de Dios dijo: “¡Déjala en paz! Ella está muy angustiada, pero el Señor no me ha dicho por qué”. ”¿acaso yo le pedí a usted un hijo?” – dijo ella – “¿No le rogué que no me engañara?” – Número de diapositiva 10
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Eliseo le dijo a Giezi: “Arréglate la ropa, toma mi bastón y ponte en camino. Si te encuentras con alguien, ni lo saludes – Número de diapositiva 11
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Giezi se adelantó y colocó el bastón sobre la cara del niño, pero no hubo sonido ni respuesta. – Número de diapositiva 12
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Entonces Giezi volvió a encontrarse con Eliseo, que iba camino de la casa. "El niño no se ha despertado", informó. – Número de diapositiva 13
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Cuando Eliseo llegó a la casa, allí estaba el niño muerto en su lecho. Entró, cerró la puerta y oró al Señor. – Número de diapositiva 14
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Estiró su cuerpo sobre el niño y el cuerpo del niño se calentó. Eliseo caminó de un lado a otro de la habitación y se recostó sobre el niño nuevamente. El niño estornudó siete veces y abrió los ojos. – Número de diapositiva 15
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Eliseo le dijo a Giezi que llamara a su madre. Cuando ella entró, él dijo: “Puedes llevarte a tu hijo”. Ella cayó a los pies de Eliseo y se postró en tierra. Luego tomó a su hijo y salió. – Número de diapositiva 16
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Número de diapositiva 17