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Jesús muestra su amor por los niños

Ejemplos de los evangelios del cuidado de Jesús por los niños.
Contribución de Max7.org
1
Jesús siempre ha tenido un lugar especial en Su corazón para los niños.<br/>Una vez los seguidores de Jesús se acercaron a Él y le preguntaron: “¿Quién es el mayor en el reino de los cielos?”<br/>Jesús llamó a un niño y le dijo: "Les digo la verdad. Debéis cambiar y volveros como niños pequeños. Si no hacen esto, nunca entrarán en el reino de los cielos. La persona más grande en el reino de los cielos es la que se hace humilde como este niño. El que recibe un niño en mi nombre, a mí me recibe” (Mateo 18:1–8). – Número de diapositiva 1
2
Una vez, cuando Jesús estaba enseñando a un grupo grande de personas, algunas madres intentaron traerle a sus hijos para que los bendijera. Los discípulos de Jesús intentaron impedir que llegaran a Jesús.<br/>Cuando Jesús vio lo que estaba pasando, dijo: "Dejen que los niños vengan a mí. No los detengáis, porque el Reino de Dios es de personas que son como estos niños. Les digo la verdad. ¡Debéis aceptar el reino de Dios como un niño pequeño, o nunca entrarán en él!” (Lucas 18:15-17). – Número de diapositiva 2
3
Una vez Jesús necesitaba alimentar a una gran multitud de personas pero nadie tenía comida. Un niño ofreció a Jesús su comida de cinco panes y dos pececitos. Jesús usó la comida del niño para alimentar a todos (Juan 6:1-13). – Número de diapositiva 3
4
Una vez Jesús supo que una joven que estaba muy enferma había muerto. Le dijo a su padre que tuviera fe en Él. Tomó a la niña muerta de la mano e inmediatamente ella volvió a la vida. Les dijo a sus felices padres que le dieran de comer (Lucas 8:40–56). – Número de diapositiva 4
5
Al entrar Jesús en un pueblo, vio el cortejo fúnebre de un joven que había muerto. Jesús se acercó, tocó el ataúd y los portadores se detuvieron. Él dijo: "Joven, te digo: ¡levántate!".<br/>El joven muerto se incorporó y empezó a hablar. Y Jesús se lo devolvió a su madre (Lucas 7:11-17). – Número de diapositiva 5
6
Cuando Jesús entró en Jerusalén montado en un asno, la multitud gritó "Hosanna" y le dio la bienvenida. Pero cuando Jesús entró en el templo, que los soldados romanos pasaban desapercibidos, los adultos dejaron de alabar a Jesús y de agitar ramas de palma, pero los niños continuaron alabandolo. – Número de diapositiva 6
7
Los líderes religiosos no querían que alabaran a Jesús. Le preguntaron a Jesús: “¿Oyes lo que dicen estos niños?”<br/>Jesús respondió: “Sí. ¿No has leído en las Escrituras: Dios enseñó a los niños y a los bebés a cantar alabanzas”? (Lucas 19:28–40, Salmo 8:2). – Número de diapositiva 7
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Número de diapositiva 8